¿Les gusta el BDSM a los amantes del GORE? - #mitos1

Hoy vengo a desmentir un mito muy expandido a cerca de los amantes del gore que siempre me pareció divertido. No contaré mucho que yo haya vivido, porque aún soy joven y solo he podido recibir comentarios, que contaré a continuación. Tan bien, porque no os diré las reacciones que he tenido hacia dichos comentarios y que mejor me han servido a la hora de dejar las cosas claras, no muy alargado.

La respuesta a este mito

No. La respuesta es un sencillo no. No a todos los que ven gore les gusta el sado. Digo no todos porque hay a quien le gustará, pero, aunque no lo creáis no esta relacionado.

A menudo, se ha relacionado este gusto por ver sangre y demás actos violentos con el sadomasoquismo o bdsm (no estoy segura de si son lo mismo, de si no, perdonar pero no estoy muy enterada con este gusto sexual). Esta relación se realiza porque consideran, aquellos no entrados en el mundillo, que el ver a una persona sufrir en una pantalla, quiere decir que nos guste infringir o sufrir dolor, y no es así. De hecho, a la gran mayoría de personas que les gusta el género gore, les gusta porque saben que es irreal y nadie está sufriendo realmente. Parece contradictorio, ¿verdad? Pero bueno, no entremos en otros temas cómo el de porqué gusta el gore.

Con esto no generalizo, como siempre. Hay a quien le gusta el gore y el sado, y es completamente admisible. Cada persona es un mundo con sus propios gustos, no todos somos iguales, y es lo divertido, ¿no?

IMPORTANTE: esta entrada la comencé a escribir en junio de 2016 y he añadido las últimas líneas en mayo de 2017 (un año después) sin cambiar nada de lo anterior. Perdonar la falta de concordancia o mi posible cambio a la hora de escribir en un año.

He vuelto.